Supersociedades respalda al oficial de cumplimiento. Imagen Freepik
A través de una reciente sanción, la Superintendencia de Sociedades mencionó que el oficial de cumplimiento es un pilar fundamental en la protección de los principios éticos y legales de las organizaciones.
Todos los oficiales de cumplimiento de empresas obligadas a implementar el SAGRILAFT y el PTEE deben estar muy satisfechos, debido a una reciente muestra de respaldo proveniente desde la Superintendencia de Sociedades.
Resulta que en noviembre de 2023 la Supersociedades impuso dos multas que sumadas ascienden a 353 millones de pesos en contra de una reconocida empresa de domicilios por diversas fallas en la implementación del SAGRILAFT y PTEE.
Allí, en la resolución sancionatoria 240-012942 del 3 de noviembre de 2023, se registra que dicha empresa admitió operar sin un oficial de cumplimiento principal y suplente entre el 1 de abril y el 26 de mayo de 2023.
A manera de defensa, la empresa mencionada señaló que el oficial de cumplimiento “es tan solo una de las tres líneas de defensa de la compañía frente a la gestión de los riesgos, por lo que en ningún momento descuidó su PTEE”.
Según la Supersociedades, este argumento no solo evidencia que la empresa acepta la comisión de la falta, sino que “le resta importancia al rol que desempeña el oficial de cumplimiento, ubicándolo de manera unidimensional en una sola línea de defensa”.
Sin embargo, agregó la autoridad de supervisión, “este rol [de oficial de cumplimiento] es el más importante del sistema y permea cada uno de sus elementos y etapas”.
Por consiguiente, la falta de este cargo clave resultó en una violación significativa de las regulaciones, lo que llevó a la Superintendencia a intervenir y aplicar las medidas administrativas correspondientes.
En dicha sanción se realiza un análisis por parte de la autoridad, en la cual se destaca la relevancia fundamental del oficial de cumplimiento en la estructura organizativa de las empresas, subrayando la necesidad de su designación y empoderamiento para garantizar la integridad y la eficacia de los sistemas.
Oficial de cumplimiento es líder y administrador: Supersociedades
Dentro de la resolución sancionatoria, la Supersociedades manifestó que el capítulo 13 de la Circular Básica Jurídica “caracteriza estructuralmente al oficial de cumplimiento como el líder y administrador del PTEE”.
Además, “lo faculta para que, desde este rol de líder participe en su diseño, implementación, auditoría, verificación y monitoreo, con capacidad en cada instancia descrita para tomar decisiones”.
Las reflexiones de la Superintendencia fueron más allá, al punto de afirmar que la ausencia del oficial de cumplimiento, así sea temporal, deja necesariamente interrogantes importantes, como: ¿quién dirigió el sistema en el periodo de incumplimiento? o ¿cómo se gestionó el PTEE al quedarse la compañía sin el rol responsable de su dirección?
Así mismo, el supervisor resaltó que “no encuentra excusa alguna para que antes de que se presentara la vacancia en el cargo, no se hubiera advertido la necesidad de designar un oficial de cumplimiento suplente, lo cual hubiera evitado dejar acéfalo el mayor y más importante cargo del PTEE”.
En síntesis, lo que hizo la Supersociedades fue enviar un fuerte mensaje: el oficial de cumplimiento no es simplemente un puesto más en la jerarquía empresarial, sino el garante del cumplimiento efectivo de las políticas y procedimientos establecidos para mitigar riesgos y promover una cultura de transparencia y ética.
Por tanto, la designación y empoderamiento del oficial de cumplimiento deben ser prioridades innegociables para cualquier organización comprometida con el buen gobierno corporativo, la transparencia y la sostenibilidad empresarial.