Por medio de un comunicado el Grupo de Acción Financiera Internacional (Gafi) se mostró satisfecho con el ‘‘compromiso político de alto nivel’’ asumido recientemente por Irán para acogerse a un plan de acción que le permita superar las ‘‘deficiencias estratégicas’’ de sus políticas contra el lavado de activos y la financiación del terrorismo.
Hasta la semana pasada Corea del Norte e Irán eran los únicos países del mundo reseñados en la denominada lista roja de Gafi de jurisdicciones con alto riesgo de lavado de activos y financiación del terrorismo, y parecía que allí se quedarían por muchos años.
No obstante, esa realidad parece cambiar debido a que las autoridades iraníes decidieron solicitar la asistencia técnica del Gafi para implementar medidas de control contra estos dos delitos.
Ante la importancia del compromiso político asumido, ‘‘el Gafi ha suspendido [las] contramedidas por doce meses con el fin de monitorear el progreso de Irán en la aplicación del plan de acción’’.
En la práctica, esto quiere decir que el máximo organismo de lucha contra el lavado de activos en el mundo le dio un periodo de gracia de un año a Irán para que se ponga al día en el cumplimiento de las 40 recomendaciones.
Eso sí, Gafi aclaró que mientras Irán cumple con los estándares continuará reseñado en la lista roja, pero la sola iniciativa del país de vincularse al sistema internacional AML/CFT ya hace prever que su salida está muy cercana.
Con este hecho de presente se concluye que Corea del Norte es el único país del mundo que no tiene interés alguno en adherirse a los estandares globales contra el LA/FT.